Perros abandonados recogepelotas buscan ser adoptados en el Abierto de Brasil
Un total de seis perros cambiaron el albergue por las pistas de tenis y realizaron una demostración de sus habilidades.
Los perros abandonados también fueron protagonistas hoy como recogepelotas durante la semifinal del Abierto de Tenis de Brasil, que se disputa en Sao Paulo, destreza con la que buscan conquistar a sus futuros dueños.
Un total de seis perros cambiaron el albergue por las pistas de tenis y realizaron una demostración de sus habilidades poco antes del primer encuentro de las semifinales del torneo por parejas, que enfrentó a los argentinos Carlos Berlocq y Nicolás Kicker contra el neozelandés Artem Sitak y el holandés Wesley Koolhof.
Sin embargo, fueron Daniel Orsanic, capitán del equipo de Argentina en la Copa Davis, Gustavo Teisen Pereira y Eduardo Russi, los tenistas voluntarios para disputar el encuentro amistoso en el que los perros participaron como recogepelotas.
Antes de entrar en el terreno de juego, los animales captaron las miradas del público que se desplazó hasta el gimnasio Ibirapuera para asistir a la penúltima jornada del abierto, una competición ATP categoría 250 que se juega en polvo de ladrillo.
Este es el tercer año consecutivo que la empresa organizadora, PremieR Pet, promueve esta iniciativa tras el éxito de años anteriores que, según ellos, repercutió en Brasil y en otros países como "Estados Unidos, Inglaterra, India o China".
"El foco es la adopción responsable" de los animales, aseguró a Efe Marcia Leone, presidenta de la ONG Patinhas Unidas, asociación colaboradora y encargada de escoger a los perros que saldrán al terreno de juego.
El color, la edad y la actitud desinhibidora de cada animal son los criterios que la ONG establece para elegir a los perros recogepelotas.
"Desgraciadamente en Brasil todavía hay mucho prejuicio en adoptar animales de color negro" y "el sesenta por ciento de nuestros animales son negros", aseguró Leone.
No obstante, tras finalizar la exhibición, uno de esos perros fue acogido por una persona del público.
EFE